5 hábitos que los mexicanos cambian cuando están en USA

Diariamente cientos de miles de mexicanos cruzan a los Estados Unidos a lo largo de la frontera que separa a ambos países. Siendo los dos muy distintos en el aspecto cultural y legal, siempre es sorprendente ver la manera en la que los mexicanos más sucios y desconsiderados se transforman en individuos llenos de virtud y respeto por la ley en cuanto ingresan al país del norte.

Aquí hay algunos de esos asombrosos cambios:

1- Dejan de tirar basura

En México tirar basura en las calles parece ser el deporte nacional y los habitantes lo hacen de manera irreflexiva, como si fuera un reflejo automático. Actúan como que el lugar natural de la basura es en donde uno desee dejarla.

Sin embargo, en cuanto cruzan a los Estados Unidos se vuelven individuos conscientes y preocupados por la limpieza del espacio público; por lo que no se los ve tirar ni siquiera una envoltura de chicle.

Quizás el hecho de que las multas estadounidenses por esta infracción son ridículamente elevadas tiene algo que ver con este cambio.

2- Se vuelven conductores modelo

Tijuana, como Monterrey, se caracteriza por tener unas vialidades sumamente agresivas en las que casi nadie respeta el reglamento de tránsito, ni al peatón o los límites de velocidad. Que no usan direccionales y que creen que las líneas de los carriles son una sugerencia en vez de una obligación.

Pero en cuanto pasan al país del norte se convierten en conductores modelo y manejan 10 millas abajo del límite de velocidad. Sin embargo la educación y conocimiento vial no pueden fingirse; así que en ocasiones su incapacidad de conducir de manera civilizada sale a relucir y resulta en bien merecidas multas.

3- Aprenden a estacionarse.

Conscientes de los costos de la grúa y la liberación de los vehículos de la retención; se estacionan en donde deben, sin estorbar ni dañar a otros vehículos; pero al volver a México olvidan esos buenos modales y siguen estacionándose donde y cuando les place.

4- Se hacen más mansos y dejan de regatear.

Aunque no es ilegal regatear ni reclamar, los visitantes a la Unión Americana se vuelven mucho más mansos con los vendedores y prestadores de servicios; aún el más déspota se vuelve de lo más comprensivo y paciente.

5- Si son presumidos, se les quita.

Quienes se sienten en México la gran cosa, se vuelven más humildes cuando pasan al país vecino y le bajan bastante a sus actitudes prepotentes.

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